El hatha yoga es una de las sub ramas de esta milenaria práctica proveniente del sudeste asiático. Hoy en día se trata de una de las modalidades más extendidas a nivel mundial y normalmente es el estilo de yoga predilecto para los principiantes. Esto se debe a su carácter pausado que permite familiarizarse de forma apropiada con las diferentes posturas que lo distinguen.
Teniendo en cuenta esa relevancia desde el Centro Shiva Shakti preparamos esta publicación en la que te explicamos todo lo que debes saber sobre el hatha yoga, con el objetivo de que te familiarices con sus características y puedas entender la naturaleza del tipo de práctica a la que te estarás sumando.
Características del hatha yoga
El hatha yoga es la práctica más recomendada para principiantes por el simple hecho de que no requiere muchos conocimientos o experiencia previa para llevarse a cabo de una forma exitosa. Ten en cuenta que esa realidad no implica que necesariamente este sea el tipo de yoga más fácil, pero si tiene que ver mucho con su carácter pausado lo hace más favorable para todo tipo de personas.
Eso significa que las clases de hatha yoga suelen ser eventos más tranquilos que otros estilos, en especial porque se centran en un buen alineamiento del cuerpo y en un manejo minucioso de la respiración. De modo que algo que puedes esperar del hatha yoga es que el profesor te explique cada postura con bastante detalle. En realidad, estará guiándote a lo largo de cada segmento de la clase.
Igual es importante que tengas presente que siempre puedes adaptar la práctica a tu nivel de conocimiento, pues lo importante es disfrutar de la experiencia sin centrarte de forma excesiva en alcanzar la postura perfecta. Lo mismo aplica en evitar compararte con el compañero de al lado, ya que el hatha yoga no es una competición y se trata de un esfuerzo de autocuidado.
Principales posturas
Lo más habitual es que la clase de hatha yoga esté estructurada con un comienzo que busca despertar el cuerpo. Por ello es común que se use la postura del gato y la vaca, pues ambas son útiles para mover la columna vertebral mientras se sueltan tensiones y se entra en un estado mental de atención plena.
Después se continúa el calentamiento con varios saludos al sol que también ayudan a ir preparando el cuerpo para las siguientes posturas de mayor complejidad. Cuando ya se practican las posturas más exigentes se recurre a algunas de las más conocidas, tales como los guerreros, la postura del árbol e incluso algunas de las inversiones, aunque esto último va dependiendo del nivel de la clase.
Para volver a bajar la intensidad se suele llegar a una tercera o cuarta etapa con posturas sentadas que contribuyen a empezar el proceso de enfriamiento del cuerpo. Buenos ejemplos de ello podrían ser las flexiones hacia delante, justo como la postura de la pinza. Además, lo más común es que el hatha yoga termine en savasana, también conocida como la postura final de relajación.
¿Qué materiales necesito para practicar el hatha yoga?
Ahora que conoces las características que distinguen al hatha yoga también es importante que te familiarices con los materiales que suelen ser requeridos para llevar a cabo esta práctica:
1. Mantas de meditación
Estas mantas te servirán para proteger la integridad de tus articulaciones, lo cual es ideal si has sufrido alguna lesión o si quieres más comodidad en posturas en las que el contacto de las rodillas con la esterilla suele molestar. Además, son ideales para que puedas sentarte encima durante los ejercicios de respiración.
2. Cinturón de yoga
Los cinturones de yoga están pensados para crear espacio entre los hombros y también para poder agarrar el pie si no llegas a alcanzarlo con tu mano. Un buen ejemplo de esto son las posturas de supta y padangusthasana, ya que a menudo es difícil agarrarte del pie sin tensar de forma excesiva los hombros.
3. Bloques de yoga
Los bloques de yoga son ideal para conseguir ayuda en las posturas en las que necesitas acercarte al suelo. Un ejemplo de este escenario es la postura de trikonasana, también conocida como postura del triángulo, pues gracias al bloque se puede evitar curvar la columna.
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