La mujer en el mundo del Yoga.
Una realidad a transformar.
La intención de estas palabras es arrojar un poco de luz sobre el mundo del Yoga, una disciplina practicada mayoritariamente por mujeres. No trato de escribir un artículo sexista, y he de afirmar que pese a que el mundo del Yoga parece que en unos aspectos evoluciona rápidamente, en otros, sin embargo, muestra signos de estancamiento. Espero que estas palabras sean útiles para sacar al yoga de esta intersección, agradeciendo de antemano todos vuestros comentarios.
Las personas que nos dedicamos a enseñar Yoga lo tenemos muy presente en nuestra labor, tratamos al alumnado por igual, dándole más importancia a su luz interna que a su género. Ponemos a la persona y a su fuerza interna por encima, ya que lo más importante a la hora de aprender o enseñar no es ser hombre o mujer tanto como hacerlo desde el amor y la presencia. Pero esto no ha sido siempre así.
Echando una mirada hacia atrás, podemos reconocer la gran labor de la mujer en la lucha por ser reconocida a nivel legal, político y profesional dentro de la sociedad, y aunque todavía quedan obstáculos por salvar, gracias a esta labor hoy las mujeres podemos disfrutar de nuestra libertad como seres humanos, y también desarrollar e incluso compartir nuestras capacidades y potencialidades.
Si reflexionamos sobre la idea profunda que, tanto hombres como mujeres, podemos tener sobre la figura femenina y su capacidad para gobernarse a sí misma, e incluso de acompañar a otras personas en su camino de aprendizaje y autorrealización, nos podemos dar cuenta de que esta idea nos condiciona profundamente a la hora de reconocer a una mujer como maestra.
Esto en la práctica, se resume en que la mayor parte de las veces cuando buscamos comenzar el camino de Yoga, ya sea a través de un proceso formativo, ya sea a través de un retiro, vamos a recurrir con más facilidad y confianza a una figura masculina. Es un tema para reflexionar personalmente de una forma honesta.
Para ponernos al día en relación a cómo el mundo del yoga tiene en cuenta a la mujer en la actualidad, comparto estas experiencias. Hace poco, estuvimos en un congreso de yoga afamado a nivel internacional, en el que el 90% del profesorado eran hombres y el 90% de las personas asistentes eran mujeres. Por otro lado, echando un vistazo a la mayoría de escuelas de yoga del Estado por no decir de la Tierra, podemos ver que la mayor parte están dirigidas por hombres. Por no hablar de la India, la cuna del Yoga, donde la mujer todavía no ha salido del concepto de esposa, salvo en casos puntuales y donde la mayor parte de las mujeres que practican yoga no son indias sino occidentales.
La jerarquía masculina en la familia, en el trabajo y en las relaciones sociales, tanto en oriente como en occidente, se ve reflejada claramente en el mundo del Yoga. Y si somos capaces de desactivar esos códigos profundamente arraigados, seremos capaces también de ver a la mujer de una manera diferente.
Pues bien, remontándonos a antiguos tratados de yoga, podemos reconocer que desde sus bases esta disciplina ha estado masculinizada. Estos textos prácticamente no hacen referencia a la mujer mas que para, en ocasiones, referirse a ella cuando hablan de que el hombre, si quiere seguir el camino de la realización, ha de renunciar a la mujer y al dinero. También lo vemos en los dos textos que, por excelencia, se estudian en el 95% de las formaciones de Yoga, los “Yoga Sutras de Patánjali”, más neutro en su lenguaje pero sigue siendo un hombre la autoridad que recopila, recoge y enhebra la esencia del Yoga. Y también el Bhagabad Guita, ¿cuántas figuras femeninas aparecen? Con lo guerreras que nosotras somos;)
Sin embargo, desde el siglo XIX-XX, como era de esperar, la figura femenina comenzó a irrumpir saliendo del concepto de mujer como esposa, madre y amante para desplegar sus alas, descubrir su potencial y compartirlo.
En este sentido, y como ejemplo de mujer como maestra, cabe destacar a Sri Anandamaji Ma, mujer del siglo XIX que sin guía de gurú alguno, se realizó espiritualmente. Siendo después reconocida como maestra en un país y una época en la que la mujer era considerada inferior al hombre. Y aquí la pregunta que lanzo es la siguiente: ¿Somos capaces las mujeres de vernos en un camino de realización sin que haya de ser un hombre quien nos lo enseñe? Contestad con honestidad.
Existen ciertos conceptos dentro del mundo del yoga que, en mi opinión, en ocasiones se han malinterpretado. Cuando en el Yoga se habla de rendición y sumisión, nos referimos a que el ego ha de terminar siendo sumiso al alma y rendirse a esta. Y en este sentido, es necesario poner consciencia a las relaciones, no vaya a ser que nos veamos rindiéndonos y siendo sumis@s a una persona y lo que es peor, a su ego. Y en el mundo del yoga en el siglo XXI, hay egos muy grandes gracias a esto.
En este punto nombraré a otra maestra, Indra Devi, quien para poder acceder a las enseñanzas de Krishna Nama Acharya tuvo que pedir ayuda al Maharash (Rey) y este obligó a Krishna Nama Acharya a aceptarla como discípula.
Se decía que una mujer no era capaz de alcanzar la realización, que solamente servía para criar y cuidar de la familia y el hogar, y esta era la mejor excusa para no aceptarlas como discípulas aunque, en mi opinión, no era esa la razón real, sino que el profundo poder de la mujer siempre ha intentado ser reprimido.
El mando que la figura del hombre necesitó coger desde el inconsciente temor a las potencialidades de la mujer, ha de ser diluido. No es posible que en el mundo del Yoga estemos potenciando estos códigos basados en la autoridad del hombre sobre la mujer simplemente por el hecho de serlo, ya que este es un camino universal que no entiende de géneros, estatus o desigualdades.
Las potencialidades de la mujer en el mundo del yoga y en otros ámbitos, en ocasiones, han sido catalogadas como debilidades a trascender o incluso como elementos negativos que generan conflicto y malestar en su entorno. Pero en realidad, todos los cambios cíclicos que tanto hombres como mujeres tenemos, son oportunidades de renovación en el entorno, que pueden ser aprovechadas para poner consciencia y evolucionar, dicho de otro modo, el aporte de la mujer y sus ciclos al entorno es tremendamente positivo, siempre y cuando el entorno esté dispuesto a ver, a crecer y a renovarse. De otro modo, la menstruación, la menopausia, la ovulación siempre serán vistas como un lastre y como algo a mejorar, cambiar e incluso a eliminar.
La labor del yoga en relación a la mujer ha de pasar principalmente por aceptar y reconocer todo lo que ella es, y en un nivel de experiencia mayor, el Yoga ha de aportar conciencia y presencia en todos y cada uno de los procesos personales de forma que estos no sean rechazados sino amados.
Hoy en día existen muchísimas líneas diferentes de Yoga, pero esenciales pocas, el Yoga que nos acerca a la experiencia de convertirnos en ser seres humanos, y nos ayuda a liberar nuestra luz. Si intentamos saltar este paso, ¿es nuestro ego quien practica y crece?
Para ir terminando, nombraré a una de las maestras del siglo XIX-XX. Mirra Alfasa, conocida como la compañera espiritual de Sri Aurobindo, (inciso: a él no se le suele denominar como el compañero espiritual de La Madre) ella tuvo el valor de quedarse en una sociedad completamente masculinizada como era la India en aquellos tiempos y, entre otras cosas, gestó la ciudad laboratorio de Auroville, hoy día una de las mayores comunidades ejemplo del planeta. Ella fue “La Madre”.
Dicho todo esto, tengamos en cuenta la trayectoria del Yoga con respecto a la mujer, y no consintamos mujeres y hombres del mundo del Yoga que se sigan repitiendo estos patrones.
Quiero animar a la reflexión a toda la comunidad yogui, tanto a hombres como a mujeres sobre este asunto dentro de sí, y ante todo a las yoguinis les animo a creer y a confiar en su fuerza, y a no consentir sumisión hacia nadie, ni hacia nada más que a su propia maestra interior.
Suscribo todo lo que dices,Saraswati.Las mujeres ahora somos superwoman:nos encargamos de nuestros hijos hasta que crezcan,trabajamos,hacemos tareas domesticas perfectas cual profesonal,cuidamos de nuestras parejas hasta que nos dejen por otra más jóvenes,tenemos un aborto al mes y todo ello encerrado en un cuerpo diez,yo he decidido bajarme de ese carro y moveme por las energías.De hecho ahora mísmo estoy percatandome de que si quitas el cuerpo lo que hay dentro es un hombre y una mujer asi que si hay buenas vibras que más da que sea hombre o mujer tanto en la vida cotidiana como en el amor…jajaja!Un abrazo de mujer a mujer.Gracias eternas por éste articulo y por tus clases.
Muchas gracias por tus palabras Luna. Un abrazo.
Sabias palabras Saraswati, me han llegado a lo mas profundo de mi ser. Gracias!!!
Muchas gracias por tus palabras Maite. Esa era mi intención, llegar a lo más profundo de cada Yogui Mujer. ??
Lo que mas valoro, mas que la historia de la mujer en el camino de la Realizacion a traves del Yoga de la cual nos escribes y que se podria hablar y teorizar dandole sentido a la Historia ,,,,,,
es que has visto algo oscuro en tu camino que no te gusta y tratas de sacarlo a la luz y tratar de mejorar,y a la vez compartirlo con tu alrededor,,,,tanto escribiendo
este escrito ,como dando un paso adelante y poniendote al frente junto con tu pareja de igual a igual en la apertura del centro de yoga,,,,, me gusta mas lo que haces
De cualquier modo creo que la mujer en esencia no necesita revindicarse poque sabe que es la MADRE de la creacion y se siente llena,,,,,,,sin embargo el hombre necesita revindicarse tanto con la leyes del mas fuerte,,,,,,,como a niveles espirituales,,,,,,,,porque lo que queda para la Historia y lo que hace que veamos que los grandes maestros fueron hombres son su aspecto exterior, son sus ruinas porque el Trabajo verdadero fue su camino de busqueda e indagacion para Realizarse ,,,,,,,y en este gasto de energia vital es la causa de que vivan menos,,,
creo que la mujer por naturaleza porque es la madre ,de mujeres y hombres tiene mas desarrollado las leyes del Amor y no necesita revindicarse en esencia
de cualquier modo tanto los grandes maestros y maestras de la historia , habria que preguntarles cuantos se consideraban maestras o maestros,,,creo sinceramente que todos estos planteamientos ni se les pasaria por la cabeza o lo considerarian un juego de de ñiñas o ñiños,,,,,,,creo que cuando uno despierta todo esto ni se lo cuestiona,,,,me quedo con el valor su Trabajo para la Humanidad ,,,,,,y,,,,siento Respeto,belleza,gratitud,amor
gracias ,,,,,,por ponerte en mi camino,,,,,,,cuando abro los ojos despues de meditar y te veo siento que lo sabes todo,,,,,,,,por eso siento mucho respeto por todo lo que escribes a la vez que gratitud por tus enseñanzas
Gracias bella Saraswati, absolutamente identificada con el texto, muy claro y cierto. Tampoco es menos cierto que muchas de nosotras, vemos también a las maestras, que nos guian en la enseñanza, igualmente que al hombre, pues en el contenido, la forma de transmitir, el ejemplo, etc.., está la persona, independientemente sea hombre o mujer.
La Bella Saraswati es una de ellas.
Totalmente de acuerdo con tu texto Sarasvati.
Y compartir contigo la importancia de apoyarnos entre nosotras, respetar el trabajo y el conocimiento femenino ya que es todavía más difícil para la mujer realizar estos caminos que han estado cerrados durante siglos. La historia nos da a mujeres muy sabias, valientes y luchadoras natas. También decir que la mayoría han sido borradas de esa historia. Pero aquí seguimos luchando y apoyandonos más que nunca.
Gracias maestra Sarasvati por compartir tu camino con nsotr@s.
En ti he encontrado a mi maestra, nunca había sentido algo así con ninguna otra persona, hombre o mujer. En ti veo la luz y el amor, la sinceridad y la humildad, transmites de un modo que va más allá de las palabras. Hace pocos días hablaba de esto mismo con otra mujer que fue alumna tuya. Hay mucho trabajo por hacer, por supuesto, pero tal vez te alegre saber que muchas y muchos vemos en ti a una gran maestra. Contigo al fin del mundo Sarasvati! 😉
Hola , qué tal?
Soy profesora de yoga, amo esta labor y todo lo que conlleva, pues de un modo siempre positivo implica todo lo demás que haces-eres en tu vida.
Llevo ya años leyendo, observando y está cuestión tú tratas aquí con tanto respeto y cuidado, y apenas se habla de ella y es muy importante.
He buscado información sobre este tema y no he encontrado mucha, la verdad.
Estoy recopilando información y quiero hacer entrevistas a personajes conocidos dentro del mundo del yoga (casi todos hombres) sin mucho éxito de momento. Voy a seguir de todos modos
Darte las gracias por escribir y compartir esta cuestión, espero que sí es posible para ti me puedas ayudar a recopilar más información.
GRACIAS 🙏
Hola Pepa
Me alegra que te haya gustado el articulo. Puedes contactar con nosotros y contarte mi experiencia en el mundo del Yoga tanto dirigiendo una Escuela de Yoga, creando un método de práctica y enseñanza y las dificultades que me he podido encontrar por ser mujer en el mundo del Yoga, las cuales han sido un gran aprendizaje. Tal y como comentas, el mundo del Yoga está repleto de «Maestros», la mayoría hombres, rodeados de un montón de mujeres que les veneran y se someten a su criterio completamente jerárquico y patriarcal. Considero que lo ideal es codirigir proyectos entre hombres y mujeres, transmitiendo ambas energías, de una forma horizontal y consensuada.